Las Rinoseptoplastias son intervenciones quirúrgicas que, además, tratan el tabique nasal con el objetivo habitual de controlar o mejorar la función respiratoria. El tabique nasal (o septo nasal) es una estructura de hueso (I) y cartílago (2) que, verticalmente, separa las dos cavidades nasales. Este tabique en ocasiones, en vez de recto, puede estar desviado de múltiples formas, obstruyendo el flujo de aire y produciendo dificultades para respirar. Esta dificultad puede ser continua o intermitente y ser apreciable solo con el ejercicio o también en reposo.
Indicaciones de las Rinoseptoplastías:
•Mejorar la funcionalidad y la estética nasal simultáneamente en aquellos pacientes que tienen problemas respiratorios causados por obstrucciones debidas a desviaciones del tabique y desean simultáneamente mejora el aspecto exterior de la nariz. En estos pacientes la adecuada exploración es especialmente importante debido a las posibles limitaciones que puedan presentarse. Determinadas mejoras estéticas pueden ser incompatibles con una mejoría funcional y, al contrario, determinadas mejoras funcionales pueden condicionar un resultado estético. Es importante recibir una valoración adecuado y no programar una cirugía a ciegas. Una vez determinado el alcance del problema, se le comunicará si, en su caso, existe alguna limitación o algún condicionante especial.
Las desviaciones del tabique de la nariz no tienen por qué estar asociadas con una desviación de la nariz. Solo cuando la porción más alta del tabique nasal se encuentra desviada se produce una desviación “visible y real” de la nariz. La corrección de las desviaciones nasales constituye uno de los retos más importantes de las Rinoseptoplastías ya que, aunque es posible camuflarlas, precisa de conocimientos suficientes de modelado nasal para “enderezar” las estructuras y el eje de la nariz, y que permanezca derecho evitando su reaparición.
•Una Rinoseptoplastía también puede tener como objetivo utilizar el tabique nasal como fuente de injertos de cartílago o hueso con los que complementar la forma y reforzar las estructuras funcionales de la nariz. En estos caso no tiene por que existir necesariamente un problema respiratorio previo. Los cirujanos que nos dedicamos a la Rinoplastía empleamos con frecuencia injertos de cartílago para corregir o mejorar la estética y la función nasales tanto en casos primarios como secundarios. La mejor fuente de cartílago para este propósito es el tabique nasal y, aunque los cartílagos de la oreja o la costilla también son útiles, estos últimos se tienen como segunda elección.
•La corrección de los problemas obstructivos de la nariz no necesariamente debe incluir un cambio estético. Se puede realizar la corrección del tabique nasal y los cornetes sin necesidad de alterar la forma externa de la nariz. En estos casos la intervención se denomina Septoplastía y no conlleva ningún tipo de alteración estética de la nariz.
Las operaciones sobre el tabique y los cornetes pueden ser realmente sencillas y rápidas o ser altamente laboriosas cuando las desviaciones del tabique son grandes, complejas y se acompañan de desviaciones externas de la nariz o de alteraciones del tamaño de los cornetes. Al igual que en el caso de las Rinoplastías, las Rinoseptoplastías pueden realizarse de forma abierta o cerrada.