Sobre el bótox se han creado diversos mitos; sin embargo, qué tanto sabemos sobre esta terapia. Aquí, las cinco preguntas (y respuestas) que seguro te has hecho
En qué consiste el tratamiento?
El objetivo radica en “prevenir” desde temprana edad que se profundicen los surcos de expresión que predominan en la región frontal, entrecejo y arrugas del contorno de los ojos. Este producto actúa favoreciendo la relajación muscular, con una duración de aproximadamente de 4 a 6 meses, ya que su efecto es reversible. Se aplica de manera segura mediante micro inyecciones sin anestesia, por ser indoloro y sin dejar cicatrices.
¿Cuándo comenzar?
Siempre existe el cuestionamiento sobre cuándo iniciar con las aplicaciones de toxina botulínica para eliminar esas líneas y arrugas. Aunque no existe una edad adecuada, lo ideal es comenzar entre los 30 y 35 años, y así atenuar los primeros signos de envejecimiento que se presentarán a partir de la tercera década.
¿Cuáles con las claves para mantener el efecto del bótox?
El cuidado de nuestra piel requiere de un constante equilibrio, para lograrlo es indispensable contar con una dieta equilibrada que sea rica en antioxidantes, vitaminas C y E, que ayudaran a neutralizar los desechos del metabolismo que dañan nuestras células acelerando el proceso de envejecimiento, prevenir el fotoenvejecimiento con el uso de protector solar a diario (FPS 30) y, por último, no olvidarse de una óptima hidratación cutánea con cremas o sueros nutritivos, que aumentaran el volumen y la tonicidad de la dermis, mejorando los efectos de la toxina botulínica.
¿Qué mitos y falsedades debemos conocer?
- El tratamiento es reversible; la duración de la terapia con toxina botulínica no es definitiva. La duración de los efectos dependerá de la profundidad de los surcos de expresión y la gesticulación de cada persona, con una duración aproximadamente de 4 a 6 meses.
- No tendrás que inyectarte bótox toda la vida… Primero deberás comenzar el tratamiento y ver los resultados definitivos para decidir si continúas. Es mentira que si decides abandonar el tratamiento aparecerán más arrugas que antes.
- Pérdida de expresividad. El uso de bótox en exceso en personajes públicos, ha generado desconfianza y dudas, pero no hay que temer si la terapia es realizada por profesionales idóneos, en los sitios correctos y con dosis adecuadas para lograr una mirada natural, armónica y relajada.